El éxito se logra a través del talento y el coraje,
pero para mantener ese éxito se necesita un buen corazón.
Muchas personas alcanzan la cima del éxito y fracasan miserablemente sin poder recuperarse porque carecen del corazón para sostener su talento.
Un buen corazón es como la base de un edificio.
El talento es como la altura y el peso del edificio.
Cuanto más alto sea el edificio, más fuerte debe ser la base. Cuando la altura y el peso exceden los límites de la base, toda la presión sobre la base colapsará.
El talento es intelecto, un buen corazón es el alma.
El talento es razón, un buen corazón es emoción.
El talento es tangible, un buen corazón es intangible.
El talento es ciencia, un buen corazón es espiritualidad.
El talento es extrovertido, un buen corazón es introvertido.
El talento es inteligencia, un buen corazón es sabiduría.
El talento es comprensión, un buen corazón es sentimiento.
Una persona con visión no solo depende de su intelecto, sino también de su corazón.
Porque el intelecto es agudo, mientras que el corazón es reflexivo.
El intelecto es amplitud, el corazón es profundidad.
El intelecto es comprehensivo, el corazón es profundo.
El intelecto es fuerza externa, el corazón es fuerza interna.
El intelecto es arrogancia, el corazón es humildad.
Pero para tener sabiduría entre el intelecto y el corazón. Esa persona necesita tener comprensión, conciencia, conocimiento... y verdadera sabiduría sobre todos los valores espirituales y materiales.
Es un proceso de práctica ardua, aprendizaje, cultivo y perfección... cada día siguiendo la comprensión completa, adentrándose en el intelecto y el corazón.
Programar, actualizar, arreglar, complementar las limitaciones, debilidades, deficiencias... para alcanzar la comprensión completa.
Eliminar, purificar toda negatividad, celos, negatividad, deseos y deseos negativos... hasta el infinito.
Tendremos un intelecto sabio, un corazón bondadoso.
Siempre escudriñar, observar, percibir, evaluar... llevar el cuerpo y la mente a la neutralidad, sin juicio, crítica... unilateralmente sobre el aspecto negativo que no se comprende completamente.
Cuando alcancemos un nivel superior de "comprender el intelecto y el corazón", percibiremos todo en la vida de una manera refinada, completa, profunda, gentil, humilde, respetuosa y respetuosa de todos los valores presentes en este mundo.
Hacia, absorber energía "positiva" y eliminar, transformar todos los elementos "negativos" que están presentes y surgiendo.
Positivo" trae alegría, felicidad, facilidad, paz...
Negativo" trae tristeza, dolor, pesadez, ansiedad...
Las cosas grandes se hacen pequeñas, las cosas pequeñas se hacen nada".
Principio: Winston Man